Los jóvenes que buscan mejorar su futuro con una buena educación han sido afectados por la crisis política de Haití.
La crisis política que vive Haití, tiene paralizado a varios sectores, entre ellos, el sector educativo. Un joven que se encuentra estudiando el último año de bachillerato cuenta no tener actividades ni pruebas académicas desde hace algún tiempo. El país no ha hecho frente a esta crisis que se está viviendo, y pareciera que no es importante seguir con las clases.
El panorama de Haití muestra un sinfín de desacuerdos entre la oposición y el gobierno en turno, y lo menos que han hablado es de la educación. En cuanto a la educación privada, el 80% ha continuado sus actividades con normalidad.
Sin embargo, no todos tienen acceso a ese tipo de educación, y es la población con menos recursos la que se siente más afectada por esta situación.
El temor a salir
Por si no fuera poco lo que está sucediendo, también existe el temor a salir a la calle, ya que no hay la misma afluencia de personas y el ambiente se torna un poco distinto. El estudiante afirma que desde el 7 de febrero, todo ha cambiado.
¿Tema político?
Para muchos, el poder continuar las clases es algo que el gobierno no quiere y por eso han decidido cerrar las escuelas desde el inicio del mes en la capital.
Por su parte, los profesores que sienten el compromiso de continuar dando clases, dejan de atreverse por alguna represalia. Otros han optado por trabajar en línea, pero no todos tienen acceso a este servicio.
Ante la incertidumbre del panorama político que se vive en Haiti, los secuestros diarios, y enfrentamientos violentos entre partidos, nadie quiere arriesgar su vida. Los sueños de los más jóvenes se han visto afectados por estos hechos y la gran mayoría quiere irse al extranjero.